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Con o sin crisis, la vida emocional puede alterarse y aparecen entonces diversos signos de que algo no anda bien: problemas para dormir, sentimientos de inseguridad, incertidumbre, ganas de llorar, angustia... Por supuesto, hay que consultar al médico pero mientras tanto, podemos recurrir a las medicinas más suaves y eficaces: las de la terapia floral. Busque la que necesita, arme su propia fórmula y siéntase mejor
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